FASES DE LA RESPUESTA SEXUAL FEMENINA Y MASCULINA
El conocimiento de las diferentes formas de respuesta sexual es fundamental para llegar a una actividad placentera para ambos.
Conocer cómo se desarrolla esta respuesta permite que las personas adecúen sus ritmos y aprendan a dar placer a su pareja.
Ya hemos superado la mítica fase del “Misionero”. Las mujeres son más exigentes en la búsqueda del placer y el hombre tiene que utilizar diferentes técnicas para conseguir dar placer a su pareja.
Aclaración: hablamos de hombres y mujeres, pero no de parejas heterosexuales. Simplemente nos centramos en la parte biológica de la respuesta sexual.
FASES EN LA RESPUESTA SEXUAL FEMENINA
A. FASE DE EXCITACIÓN La estimulación puede deberse a una excitación física, psicológica o ambas.
Los efectos fisiológicos que produce la excitación son: Aumento de la secreción vaginal (lubricación).
El inicio de la lubricación es muy rápido tras la estimulación (10-30 segundo), pero es difícil que se pueda percibir hasta que no se ha alcanzado un volumen importante. La cantidad, densidad y olor de esta secreción es diferente en cada mujer e incluso en distintos momentos.
La lubricación no indica el grado de excitación ni que la mujer "esté dispuesta" para el coito. Existen otros cambios fisiológicos como la expansión de la vagina, elevación del útero y cuello del útero.
Los labios externos de la vagina se aplanan y abren, los labios menores incrementan su tamaño así como el clítoris. Los pechos pueden aumentar ligeramente el tamaño y se produce una erección de los pezones.
Al final de esta fase se ha producido un marcado aumento de la tensión sexual.
B. FASE DE MESETA. En esta fase los niveles de excitación se incrementan, predisponiendo a la mujer al orgasmo.
Los cambios fisiológicos de esta fase son: nuevo incremento en el tamaño de los pechos, dilatación de la aureola que rodea el pezón, mayor incremento de la vagina, subida-retirada del útero, congestión vascular en los labios menores (aumentan su tamaño entre 2 y 3 veces).
El clítoris se retrae llegando a ocultarse y aparece la plataforma orgásmica: vasoconstricción muy importante en la vagina que puede llegar a disminuir la apertura de la vagina hasta un 30% facilitando "apresar" el pene una vez introducido.
Es posible que en esta fase aparezca el "rubor sexual": manchas rojizas debidas al aumento del riego sanguíneo que aparece en la parte inferior del esternón y se extiende por los pechos y toda la parte delantera del cuerpo, pudiendo afectar al cuello, cara o espalda. El rubor sexual aparece en un 50-75% de las mujeres.
Otros cambios son el incremento de la tensión muscular, especialmente en muslos y nalgas, aceleración del ritmo cardíaco, aumento de la presión sanguínea y respiración más rápida.
C. ORGASMO Consiste en la liberación de golpe dela tensión sexual acumulada. Se caracteriza por contracciones simultáneas y rítmicas del útero, el tercio exterior de la vagina y el esfínter anal. Estas contracciones se inician de forma muy seguida (cada 0,8 segundos) y posteriormente se van distanciando.
Se producen entre 3 y 15 contracciones aproximadamente. Para la mujer es posible alcanzar orgasmos múltiples (varios orgasmos en un breve espacio de tiempo sin reducir la excitación sexual por debajo de la meseta). Es muy raro que la consecución de orgasmos múltiples sea habitual en una mujer.
D. RESOLUCIÓN Durante esta fase se invierten los cambios fisiológicos anteriores: disminuye el tamaño de los pechos y la dilatación de la aureola, se pierde la erección de los pezones.
Las contracciones del orgasmo alivian la congestión vascular de la vagina, involucionándose la plataforma orgásmica. Desaparece la coloración de los labios, la vagina se reduce, el clítoris vuelve a su posición y tamaño y el útero vuelve a su posición de reposo.
El rubor sexual va desapareciendo. Si no ha habido orgasmo tras una excitación intensa, la mujer puede experimentar sensación de malestar en la pelvis.
FASES EN LA RESPUESTA SEXUAL MASCULINA
A. FASE DE EXCITACIÓN La respuesta sexual más evidente en el hombre es la erección del pene. Esta erección se produce por la acumulación de sangre en los tejidos esponjosos del pene.
Por otra parte las arrugas o pliegues del escroto se alisan un poco y los testículos se elevan, aproximándose al cuerpo e incrementando su tamaño. En algunos hombres se da también la erección de los pezones
La erección del hombre no es algo instantáneo ni obligado una vez que se presenta el estímulo sexual, en muchos casos se produce progresivamente, y en ocasiones el ritmo de erección puede cortarse por ruidos, distracciones o preocupaciones. El miedo a no lograr la erección es la principal causa del fracaso en esta fase.
B. FASE DE MESETA Se produce un incremento en la circunferencia del pene, y en especial del glande, que adopta un color más oscuro por la acumulación de sangre. Los testículos incrementan aproximadamente un 5% su tamaño y continúan elevándose.
La elevación total de los testículos indica la inminencia del orgasmo. Durante esta fase el hombre puede sentir sensación de calor o de presión por la vasoconstricción en la región pélvica, especialmente en las zonas de la próstata y vesículas seminales.
Se produce una tensión muscular, aceleración del ritmo cardíaco, incremento de la presión sanguínea y la respiración se agita.
En esta fase suele producirse una secreción de fluido producido por las glándulas de Cowper, que se alojan en la uretra, y que suelen contener espermatozoides vivos (aviso a los de “la marcha atrás como método anticonceptivo)
C. ORGASMO MASCULINO Se divide en dos fases:
1. Los vasos deferentes, conductos que llevan el esperma desde los testículos; la próstata y las vesículas seminales comienzan una serie de contracciones que empujan el semen de la uretra. En este momento el hombre experimenta la inevitabilidad eyaculatoria.
2. Comienzan las contracciones de la uretra y el pene, así como de la próstata, provocando la eyaculación. Durante la eyaculación la vejiga urinaria se cierra herméticamente para evitar la mezcla de orina y semen. Las contracciones rítmicas (0,8 segundos las primeras), distanciándose a partir de la tercera o cuarta.
La experiencia subjetiva del orgasmo se describe como una sensación inicial de calor o presión interna (inevitabilidad eyaculatoria), seguida de unas contracciones muy placenteras. El paso del semen por la uretra suele describirse como un chorro cálido de líquido o sensación punzante.
D. FASE DE RESOLUCIÓN En el hombre el orgasmo desemboca en un período refractario en el que es fisiológicamente imposible tener otro orgasmo o eyacular de nuevo. La fase tiene una duración variable, que pasa de varios minutos a muchas horas, generalmente es mayor conforme avanza la edad.
En esta fase se invierten las modificaciones fisiológicas previas, primero se pierde la erección y posteriormente se reduce el flujo sanguíneo.
Los testículos reducen su tamaño y descienden separándose del cuerpo, y si ha aparecido el rubor sexual, desaparece progresivamente. Si no se ha conseguido el orgasmo, la resolución es más lenta y puede aparecer sensación de presión y dolor en los testículos.