TRASTORNOS RELACIONADOS CON EL TOC EN EL DSM-5
El DSM-5 introduce novedades en la clasificación del Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), creando una agrupación propia, en la que se introducen algunos trastornos que previamente estaban incluidos en los trastornos de falta de control de impulsos.
En todos ellos existen obsesiones y compulsiones.
De esta forma en el Trastorno Dismórfico Corporal hay una obsesión por algún tipo de defecto físico, lo que produce la conducta incesante de tener que mirarse al espejo.
El Trastorno por Acumulación (Síndrome de Diógenes), existe una obsesión por la acumulación de objetos sin ninguna finalidad. Esta obsesión puede llevar a problemas de Salud Pública.
En la Tricotilomanía la persona experimenta una fuerte ansiedad que calma con la conducta ritualista y repetitiva de arrancarse el vello corporal (cabeza, pestañas, cejas, pubis).
De la misma forma el Trastorno por Excoriación consiste en la conducta ritualista de pellizcarse para aliviar la tensión.
Los celos obsesivos pueden adoptar la forma de obsesiones ante la posibilidad de una infidelidad y la necesidad de calmar la ansiedad que este pensamiento conlleva mirando el móvil de la pareja o registrando sus pertenencias (desafortunadamente se está poniendo muy de moda la geolocalización).
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