AGORAFOBIA: CUANDO LA MENTE ENGAÑA AL CUERPO
¿QUÉ ES LA AGORAFOBIA?
La agorafobia se define como un miedo irracional a sufrir un ataque de pánico ante determinadas situaciones.
Este miedo llega a obsesionar de tal forma a la persona que tan sólo con pensarlo puede sufrir los síntomas somáticos que acompañan a su miedo.
Entre los síntomas somáticos más comunes en agorafobia están:
Mareos
Ganas de vomitar
Problemas estomacales (incluyendo despeños diarreicos)
Parestesias (entumecimiento de manos o pies)
Sensación de partes del cuerpo frías
Sudoración
Taquicardia
Visión borrosa
Vértigos psicógenos
Mareos
Hiperventilación
La mayoría de los pacientes que tratamos en la Consulta Psicológica Villaverde verbalizan más el miedo a los síntomas que a la situación desencadenante.
¿CÓMO TRATAMOS LA AGORAFOBIA?
El tratamiento puede resultar complicado porque hay que trabajar con síntomas físicos, además de los pensamientos catastrofistas y vencer las resistencias del paciente a exponerse (base de la mejoría).
Hay que tener en cuenta que el miedo les bloquea y tienden a alejarse de las situaciones que les pueden provocar un “ataque”, entrando en una evitación que les alivia.
Es usual que los pacientes agorafóbicos se centren en los síntomas de la agorafobia, pero hay que tener en cuenta que los síntomas son la expresión de la agorafobia, no la causa: se tiene fiebre cuando hay infección de garganta, no infección de garganta cuando se tiene fiebre.
Por ello el primer trabajo en psicoterapia es centrar al paciente en la causa de su agorafobia y no en las consecuencias. Se trabaja la consecuencia, pero se cura cuando se desarma la causa.
