CRITERIOS DIAGNÓSTICOS TRASTORNO DE ESTRÉS POSTRAUMÁTICO (DSM-5)
A. Exposición a la muerte, lesión grave o violencia sexual, ya sea real o amenaza, en una (o más) de las formas siguientes:
Experiencia directa del suceso traumático.
Presencia directa del suceso ocurrido a otros.
Conocimiento de que el suceso traumático ha ocurrido a un familiar próximo o a un amigo íntimo.
En los casos de amenaza o realidad de muerte de un familiar o amigo, el suceso ha de haber sido violento o accidental.
Exposición repetida o extrema a detalles repulsivos del suceso traumático (como socorristas que recogen restos humano, policías repetidamente expuestos a detalles del maltrato infantil).
Nota: El Criterio A4 no se aplica a la exposición a través de medios electrónicos, televisión, películas o fotografías, a menos que esta exposición esté relacionada con el trabajo.
B. Presencia de uno (o más) de los síntomas de intrusión siguientes asociados al suceso traumático, que comienza después del suceso traumático:
Recuerdos angustiosos recurrentes, involuntarios e intrusivos del suceso traumático. Nota: En los niños mayores de 6 años, se pueden producir juegos repetitivos en los que se expresen temas o aspectos del suceso.
Sueños angustiosos recurrentes en los que el contenido y/o el afecto del sueño está relacionado con el suceso.
Nota: En los niños, pueden existir sueños aterradores sin contenido reconocible.
Reacciones disociativas (como escenas retrospectivas) en las que el sujeto siente o actúa como si se repitiera el suceso. (Estas reacciones se pueden producir de forma continua, y la expresión más extrema es una pérdida completa de conciencia del entorno presente.)
Nota: En los niños, la representación específica del trauma puede tener lugar en el juego.
Malestar psicológico intenso o prolongado al exponerse a factores internos o externos que simbolizan o se parecen a un aspecto del suceso.
Reacciones fisiológicas intensas a factores internos o externos que simbolizan o se parecen a un aspecto del suceso.
C. Evitación persistente de estímulos asociados al suceso traumático, que comienza tras el suceso, como se pone de manifiesto por una o las dos características siguientes:
Evitación o esfuerzos para evitar recuerdos, pensamientos o sentimientos angustiosos acerca o estrechamente asociados al suceso.
Evitación o esfuerzos para evitar recordatorios externos (personas, lugares, conversaciones, actividades, objetos, situaciones) que despiertan recuerdos, pensamientos o sentimientos angustiosos acerca o estrechamente asociados al suceso.
D. Alteraciones negativas cognitivas y del estado de ánimo asociadas al suceso, que comienzan o empeoran después del suceso traumático, como se pone de manifiesto por dos (o más) de las características siguientes:
Incapacidad de recordar un aspecto importante del suceso (debido típicamente a amnesia disociativa y no a otros factores como una lesión cerebral, alcohol o drogas).
Creencias o expectativas negativas persistentes y exageradas sobre uno mismo, los demás o el mundo (como: "Estoy mal", "No puedo confiar en nadie", "El mundo es muy peligroso", "Tengo los nervios destrozados").
Percepción distorsionada persistente de la causa o las consecuencias del suceso que hace que el individuo se acuse a sí mismo o a los demás.
Estado emocional negativo persistente (como miedo, terror, enfado, culpa o vergüenza).
Disminución importante del interés o la participación en actividades significativas. Sentimiento de desapego o extrañamiento de los demás.
Incapacidad persistente de experimentar emociones positivas (como felicidad, satisfacción o sentimientos amorosos).
E. Alteración importante de la alerta y reactividad asociada al suceso traumático, que comienza o empeora después del suceso, como se pone de manifiesto por dos (o más) de las características siguientes:
Comportamiento irritable y arrebatos de furia (con poca o ninguna provocación) que se expresan típicamente como agresión verbal o física contra personas u objetos.
Comportamiento imprudente o autodestructivo.
Hipervigilancia.
Respuesta de sobresalto exagerada.
Problemas de concentración.
Alteración del sueño (dificultad para conciliar o continuar el sueño, o sueño inquieto).
E La duración de la alteración (Criterios B, C, D y E) es superior a un mes.
G. La alteración causa malestar clínicamente significativo o deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.
H. La alteración no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (como medicamento, alcohol) o a otra afección médica.
Especificar si: Con síntomas disociativos: Los síntomas cumplen los criterios para el trastorno de estrés post-traumático y, además, en respuesta al factor de estrés, el individuo experimenta síntomas persistentes o recurrentes de una de las características siguientes:
Despersonalización: Experiencia persistente o recurrente de un sentimiento de desapego y como si uno mismo fuera un observador externo del propio proceso mental o corporal (como si se soñara, sentido de irrealidad de uno mismo o del propio cuerpo, o de que el tiempo pasa despacio).
Desrealización: Experiencia persistente o recurrente de irrealidad del entorno (el mundo alrededor del individuo se experimenta como irreal, como en un sueño, distante o distorsionado).
Nota: Para utilizar este subtipo, los síntomas disociativos no se han de poder atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia (desvanecimiento, comportamiento durante la intoxicación alcohólica) u otra afección médica (epilepsia parcial compleja).
Especificar si: Con expresión retardada: Si la totalidad de los criterios diagnósticos no se cumplen hasta al menos seis meses después del acontecimiento (aunque el inicio y la expresión de algunos síntomas puedan ser inmediatos).
Fuente: Asociación Americana de Psiquiatría, Manual diagnóstico y estadístico de los tras-tornos mentales (DSM-5®), 5a Ed. Arlington, VA, Asociación Americana de Psiquiatría, 2014.