DEPRESIÓN INFANTIL
Los niños también se deprimen, aunque su forma de expresar este estado de ánimo puede ser completamente diferente al de un adulto.
Muchas circunstancias de la vida de los niños, y su incapacidad para comprender los sucesos, puede llevarles a una depresión que no sólo se expresa en llanto, a veces las rabietas son un síntoma a tener en cuenta.
Problemas como el acoso escolar, la timidez, celos por la llegada de un hermanito, la pérdida de un ser querido, una mudanza, el divorcio de los padres, el sentirse rechazado, pueden llevar al niño a la depresión.
Desgraciadamente cada vez es más frecuente encontrar niños preadolescentes con cuadros de depresión aguda, con autolesiones o ideación suicida. Es sumamente importante que estos niños reciban una terapia adecuada para restablecer la confianza en si mismos y la ilusión por el mundo que les rodea y su propio futuro.
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